La PREVENCIÓN será por siempre la herramienta más adecuada para evitar situaciones de emergencia como, por ejemplo, los incendios.
A continuación, quiero reseñar algunas recomendaciones muy simples, pero importantes, para la seguridad de los trabajadores en el lugar en que desarrollan su actividad:
Para la Empresa:
- Informar y capacitar a los trabajadores en lo referido a prevención de riesgos laborales y en las medidas de protección contra incendios.
- Tener un Plan de Incendios en la Empresa confeccionado por un profesional idóneo.
- Informar a los trabajadores sobre este Plan e identificar las señales básicas de evacuación presentes en los lugares de trabajo.
- No acumular material combustible en los puestos de trabajo. Almacenar sólo lo necesario para la jornada de trabajo.
- No dejar materiales inflamables abandonados en cualquier lugar.
- Mantener limpios los sectores de trabajo, cuidando recoger de forma periódica los residuos y depositarlos en los lugares destinados para ello.
- Disponer de recipientes adecuados para recoger los líquidos en caso de derrame.
- Verificar, periódicamente, el estado de las instalaciones eléctricas.
- No permitir fumar en el recinto del lugar de trabajo.
Para los trabajadores:
- No pensar que la prevención es “para tontos”. No creer que es una pérdida de tiempo el que se dedica a la capacitación en este tema. Tomarlo con seriedad.
- En caso de que se produzca un incendio, lo primero es tratar de controlar y extinguir el fuego utilizando los extintores adecuados, siempre y cuando sea posible. ¡Hacerse el héroe sale caro… no hay que correr peligros absurdos!
- Si en alguna ocasión hay que enfrentarse al fuego, es imprescindible saber identificar su naturaleza para elegir el extintor adecuado.
- Pero si en cambio no es posible controlar el fuego con los medios disponibles, se debe abandonar el lugar de trabajo lo antes posible y avisar a los Bomberos y la Policía.